La técnica Electrolisis Percutánea Intratisular (EPI®)  es una terapia de fisioterapia invasiva creada por el fisioterapeuta español  José Manuel Sánchez-Ibáñez en el año 2003 para el tratamiento de patologías crónicas de los tejidos blandos del aparato locomotor, concretamente, para tratar tendinopatías por sobreuso y fibrosis musculares.

En la Figura 1 podemos ver en la izquierda una rotura intratendón de una tendinopatía de Aquiles y en la imagen de la derecha la resolución con regeneración completa de la rotura tras el tratamiento realizado con el dispositivo EPI® Alpha.

                 El mecanismo de acción de la técnica EPI® consistiría en provocar la destrucción del tejido degenerado induciendo así, seguidamente, una respuesta inflamatoria, reagudizando el proceso crónico de este tejido cuya fase de reparación había fracasado . El Dr. José Manuel Sánchez-Ibáñez y cols. comprobaron que en el tejido (tendinoso) que contacta íntimamente con el electrodo activo o aguja catódica se produce una alcalinización del pH, afectando a todo su entorno, y una estimulación de la migración de neutrófilos y macrófagos al foco de la lesión iatrogénica. Estas células fagocitarán los productos de desecho causados por la destrucción electroquímica, “limpiando” la zona de la lesión y promoviendo la migración de otro tipo celular, los fibroblastos, que sintetizarán y secretarán diversos factores de crecimiento, facilitando la síntesis del colágeno y, por último, la regeneración de la Matriz Extracelular (ECM) .